CASUALIDAD, COINCIDENCIA Y GUERRA: UNA APROXIMACIÓN A LA AUTONOMÍA DEL PIA-R. II

Este relato forma parte de la serie.CCG



Fuente imagen:
canadian-witch.tumblr.com
—¡Sara, tenemos una videoconferencia con la rectora! —exclamó desde una distancia prudencial solicitando disculpas a medida que se abría paso entre los intelectuales que nos rodeaban.
—¿Ahora? —pregunté extrañada.
—¡Ah! —respondió Esterton interrumpiendo—. Debe ser por el tema de la estancia... imagino que ya se habrá puesto en contacto con tu universidad el departamento de organización y estudios internacionales.
Mariana se colocó a mi lado. Su brazo hacía de atril improvisado para sostener el teléfono móvil.
—Hola, Carmela —respondí con gesto asombrado.
—Hola, Sara. ¿Cómo van las cosas por ahí?
—Bien, bien.
—¿Me puedes explicar por qué se ha puesto en contacto conmigo Oxford para solicitar la ampliación de plazo para vuestra estancia?¿No se suponía que solo era un fin de semana?
—Sí, era. Tú lo has dicho.
—¿Entonces? —preguntó acercando su cara a la cámara web—. Aquello se transformó en algo muy cómico. Carmela era un pez con un solo ojo enorme.
—Pues, veras...—carraspeé—. Al parecer la ponencia a dado para mucho y aquí se está viviendo un brainstorming asombroso.
—¡Ah! ¿Un brainstorming asombroso? —repitió —Me alegro mucho —contestó sin darle demasiada importancia a lo que acaba de decir—. Pero eso no justifica que media plantilla de diversas facultades agrupadas en un magnífico grupo investigador, que no te digo yo que no...falte el lunes a todas sus clases. ¿Cómo lo hago para sustituiros sin previo aviso? —preguntó con el tono de voz alto que le caracterizaba—¡es que sois diez profesores que tienen todo el horario de los lunes por la mañana ocupado!

El grupo de ponentes proseguía junto a nosotros como si de una bandada de pájaros se tratase. Expectantes y risueños se desplazaban a mi alrededor sincronizados.

—Bien, cálmate. Creo que nosotros el lunes podemos salvarlo enviando una circular a través del aula virtual  a todos nuestros alumnos. ¿Te parece?
—¡Ah!, bien...pero ahora mismo, ¿eh?—contestó como si la solución le hubiese aparecido de forma inesperada— ¿y, el resto de semana? —volvió a preguntar cambiando su gesto a modo disgusto—,  ¿qué hacemos? Es inconcebible que se cancelen las clases una semana completa.
—¿Has mirado nuestros horarios?
—Por supuesto. 
—No te pongas nerviosa y observa bien...Casualmente, todos tenemos clase los lunes y los viernes. Excepto Ramón, que también tiene los jueves. Ya lo hemos organizado. Creo que podremos salvar la situación y espero que para el viernes ya hayamos vuelto. Sin embargo, podríamos, por si acaso, solo por si acaso, avisar de que se pondrá tareas online programadas para el viernes. ¿Te parece?

Comparte:

0 comentarios